Por Ximena Guzmán Rhenals
Dicha flor al estar sin terminar de formar es muy pequeña, sus pétalos aún están cerrados entre sí, son del tamaño de un grano de arroz. Su color es rojo con tonalidades entre el naranja y el amarillo, además de eso, es bastante delgado y frágil su tallo; este es en forma cilíndrica el cual tiene por dentro un pequeño pistilo y un sabor de néctar bastante dulce.
La flor completa está formada por muchos ramilletes de estas pequeñas flores. Otra característica significativa que se puede observar es que al tener un tallo cilíndrico con “vacío” se pueden unir en forma de cadeneta entre sí. En la parte de arriba de la flor hay pequeños pistilos de color amarillo con puntitos en su final, pero para probar el néctar se puede hacer por la parte de abajo.
El pistilo se puede sacar y dejar su tallo vacío, este pistilo es bastante delgado y su color es casi transparente, en su punta tiene un punto amarillo y tiene una textura un tanto pegajosa y mojada, de ahí el néctar que, como mencioné antes, es bastante dulce.
Por último, al no estar completamente formada, los pétalos se encontraban aún cerrados entre sí como especie de capuchos.
